Receta para robarle el corazón al Dr. Farel

Capítulo 188



Capítulo 188

Al dia siguiente, Farel llego al hospital para visitar al padre de Evrie.

No habia planeado ir, pero tenia una reunién en el hospital, y al terminar, decidid buscar el numero de habitacién de Pablo y le llevé una canasta de frutas como cortesia.

Cuando vivian en el campo, Pablo lo habia tratado bien, y a Farel no le gustaba quedar en deuda con nadie, asi que esta era su forma de devolverle su buen gesto.

Alentrar, justo se encontré con Blanca, y los tres intercambiaron algunas palabras corteses en la habitacion.

Pablo, sabiendo que Evrie se habia ido al extranjero, mostraba en su rostro ese orgullo paterno, pero no podia evitar preocuparse.

—Evi esta sola alla en otro pais, no sé si se estara adaptando bien. —

Blanca lo consolé: —Tio, no te preocupes, el Sr. Reyes cuidara de Evi. No tienes idea de cuanto la valora, la esta preparando para grandes cosas. Y ademas, el Sr. Reyes es tan guapo y adinerado, ;quién sabe? Quizas termines teniendo un yerno excepcional. —

Blanca siempre habia sido directa y franca, pero en cuanto termin6 de hablar, se dio cuenta de su error. El exnovio de Evrie estaba alli, y sus palabras eran como una bofetada para Farel. Como era de esperarse, Pablo también miré a Farel de reojo.Content is property © NôvelDrama.Org.

Farel estaba recostado en la ventana de la habitacion, con los parpados bajos y una mirada serena. Su rostro no mostraba cambio alguno de emocién.

Blanca, aunque se dio cuenta de que habia metido la pata, se tranquiliz6 pensando que ya habian terminado, y que no tenia nada que temer.

Evrie no iba a quedarse sin amor para siempre.

—De todos modos, no te preocupes por ella. Con el Sr. Reyes cerca, Evi estara segura. —

Pablo solté una risita nerviosa, sintiendo curiosidad hacia el Sr.copy right hot novel pub

Reyes y pregunto:

— Y ese Sr. Reyes como es? ¢Tienen alguna foto? gAcaso es mas guapo que el Doctor Farel? — No lo creia posible.

Blanca, animada, buscé en el sitio web de la empresa donde habia una foto de Leandro Reyes. Agrand6 la imagen en su teléfono y se la mostré a Pablo.

Pablo dirigid su mirada hacia la pantalla del movil, y al ver esa cara amable y nitida, sintid un sobresalto en el corazén, que comenzé a latir descontroladamente.

—zEstas segura que este es el Sr. Reyes? — Le pregunto Pablo con un hilo de voz tembloroso.

Blanca asintio: —Si, ves qué guapo es? —

Pablo, con los labios temblorosos, no dijo nada mas y tomé su teléfono para llamar a Evrie. Nadie le contest.

Pablo lo intent6 varias veces, pero seguia sin poder comunicarse con Evrie.

El panico se apoder6 de él, y un sudor frio comenzé a brotar por su frente.

— Alguno de ustedes puede contactar a Evi? —

Pablo miré a Blanca y a Farel.

Farel se detuvo un momento y nego con la cabeza: —Creo que ella me bloqued. —

Pero algo no estaba bien.

~Evrie habia bloqueado a su propio padre también?

Blanca intento llamarla desde su teléfono, pero sdlo se escuché una respuesta automatizada. —Lo siento, el numero que ha marcado no esta disponible en este momento...—

El rostro de Pablo se torné atin mas preocupado.

Blanca no estaba preocupada y atin no percibia la gravedad de Ia situacion.

Justo entonces, Blanca recibié una llamada de trabajo tuvo que salir a atenderla.

Cuando Blanca se fue, Pablo agarré la mano de Farel con una mezcla de inquietud y suplica en sus ojos.

Farel capté su panico y le pregunté: — ¢Conoces a Leandro Reyes? — Pablo desvid la mirada, viéndose reacio a mirar a Farel a los ojos.

—Tal vez lo conozca, ha pasado mucho tiempo y no estoy seguro. Pero algo en mi interior me dice que esta pasando algo raro.

Farel noto que estaba ocultando algo, pero parecia que no queria hablar de eso.

Pero seguia sin poder comunicarse.

No era que ella lo hubiera bloqueado, sino que... la sefial habia desaparecido.

Los ojos de Farel se oscurecieron, estaba Ileno de pensamientos insondables.

Justo en ese momento, su teléfono vibré. Era la llamada de su asistente.

Farel contest al instante.

—Sr. Haro, Leandro cambio de bus tres veces, y la ultima vez que lo vimos fue en la periferia cerca del Triangulo Norte. —

La mirada de Farel se oscurecié en un instante.


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